El proyecto dio lugar a una experiencia en la naturaleza en la que se tiene como objetivo principal que cada escolar tenga una experiencia de aventura en un entorno natural donde pueda manipular realidades naturales en contraposición a una vida común donde predomina el digital y virtual. Otro objetivo es que esta experiencia suponga una actividad lúdica a consecuencia del descubrimiento y de la exploración.
Los participantes fueron 1000 escolares de Enseñanza Primaria (de edades aproximadas de 6 a 12 años) del Ayuntamiento de Vigo y se desarrolló en el entorno del Parque Forestal del Vixiador.
Los escolares eran recibidos por los monitores y lo primero se les situó geográficamente y se les hizo entrega de un “Mapa-guía”. En él figurarán un mapa del espacio y los principales medios que en él iban a conocer . En este mapa está trazado un itinerario que los escolares tuvieron que recorrer y los puntos concretos a donde tienen que llegar. Divididos en grupos llegaron la cada uno de estos puntos donde tuvieron que superar una prueba de exploración o rastreo.
Punto primero: Rastreo de huellas en el barro.
El escolar tenía que identificar una serie de huellas y rastros en el sustrato arcilloso. Estas huellas fueron recreadas con anterioridad a la llegada de los niños mediante tampones específicos. Las huellas a reproducir fueron las de: perro doméstico, gato doméstico, zorro, erizo, garza real y lavandera.
Punto segundo: Rastreo de excrementos.
El escolar tuvo que encontrar e identificar una serie de excrementos. Después de encontrarlos tuvo que deducir el tipo de alimentación tiene el animal que dio lugar a las deposiciones. Una parte de los excrementos fue esterilizada previamente para su manipulación. Los excrementos a estudiar fueron de zorro, conejo, pito real y erizo.
Punto tercero: Rastreo de semillas y frutos comidos y señales de actividad
El escolar tuvo que encontrar una serie de restos de alimentación y actividad en un área del espacio. Los frutos y semillas fueron piñas roidas por ardillas, bellotas roídas por ratones de campo, bellotas trabajadas por páridos, piñas trabajadas por pitos reales, manzanas roídas por ratones de campo, castañas roídas por micromamíferos.
Punto cuarto: Rastreo de plumas.
El escolar debió encontrar e identificar una serie de plumas así como interpretar una “escena del crimen” donde un azor desplumó a una urraca antes de llevarla al nido. Muchas rapaces solo se alimentan de la cabeza de la presa y llevan el resto a sus crías. Las especies a tratar fueron: la urraca, el arrendajo, la paloma y el mirlo.
Punto quinto: Rastreo de exuvias.
El escolar debió encontrar las últimas mudas de las libélulas emergidas en el entorno del pequeño humedal e identificar la especie a la que pertenece.
Punto sexto: Subir a un nido de ave en un árbol.
Los escolares subieron asegurados con arneses, línea de vida y casco a un árbol para observar un nido de ave (urraca) donde observará su estructura y comprobará la existencia de huevos en su interior.
Punto sétimo: Identificación de cantos de aves silvestres.
El escolar tenía que identificar una serie de cantos de aves que escuchará en el mismo hábitat de la especie. Las distintas voces fueron reproducidas por medios digitales y al tiempo se le presentarán imágenes de la especie estudiada. Los cantos y voces corresponderán a el mirlo, el petirrojo, el chochín y el cárabo.
